A lo largo de la vida, todos experimentamos pérdida de masa ósea. Sin embargo, en las mujeres, el cuerpo mantiene un equilibrio hasta alrededor de los 30 años, momento en que la masa ósea alcanza su punto más alto. A partir de los 35 años, comienza un declive, pero es con la llegada de la menopausia cuando la pérdida de masa ósea se acelera.
¿Por qué las mujeres pierden más hueso después de la menopausia?
La respuesta es simple: tras la menopausia, los ovarios dejan de producir estrógenos, una hormona esencial para mantener huesos fuertes y saludables. Esta transición puede llevar a la osteoporosis, aumentando el riesgo de fracturas
Motivos de la Pérdida de Masa Ósea
Diversos factores pueden contribuir a la pérdida de masa ósea. Algunos de los principales incluyen:
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Antecedentes familiares de osteopenia u osteoporosis.
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Constitución pequeña y delgada.
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Uso de medicamentos esteroides.
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Pertenecer a la raza blanca o asiática.
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Consumo de tabaco y alcohol.
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Falta de actividad física.
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Dieta pobre en vitamina D y calcio.
Cuándo Realizar Pruebas de Densidad Ósea
Para evaluar la salud ósea, se recomienda una prueba de densidad ósea o densitometría en mujeres postmenopáusicas con factores de riesgo, mujeres mayores de 65 años y aquellas que hayan experimentado fracturas óseas.
Claves para Evitar la Pérdida de Masa Ósea
Afortunadamente, hay medidas que pueden ayudar a mantener la masa ósea en niveles adecuados:
1. Abandona la vida sedentaria: Incorpora actividad física como natación, paseos largos o ejercicio en el gimnasio.
2. Aumenta la ingesta de calcio: Entre los 30 y 35 años
3. Asegura suficiente vitamina D: Esta vitamina es crucial para la absorción del calcio. Realiza análisis de sangre para evaluar tus niveles.
Alimentos Ricos en Calcio para la Menopausia
Incluir alimentos con alto contenido de calcio en la dieta es esencial. Aquí algunos ejemplos:
1. Lácteos desnatados: Leche, quesos frescos o bajos en grasas.
2. Pescado azul: Sardinas en aceite y mariscos como gambas, cigalas y langostinos.
3. Legumbres y frutas: Garbanzos, acelgas, espinacas, puerros, cardo, ciruelas, higos secos, kiwis.
En Resumen
Después de la menopausia, cuidar la salud ósea es crucial. Refuerza tus huesos mediante una dieta balanceada y ejercicio regular. Aumentar la ingesta de calcio y vitamina D es especialmente recomendado, ya que esta última facilita la absorción del calcio. Además, la exposición solar y alimentos como la yema de huevo, el hígado y los pescados de agua salada son fuentes adicionales de vitamina D. Con estos cuidados, podrás disfrutar de huesos fuertes y una vida saludable durante y después de la menopausia. ¡Prioriza tu bienestar!